Me acaban de poner una multa de velocidad. No ha entrañado puntos, pero me ha hecho plantearme la adquisición de uno de estos aparatos, que puedo intercambiar entre mis dos coches.
Ya no son legales, «cuestan» 3 puntos y 100 eur (pronto pago incluido), aunque hubo un tiempo en el que lo fueron.
La cuestión es que con estos límites antidiluvianos que nos gastamos y el afán recaudador actual, no es difícil ser desvalijado poco a poco por la administración y algo tenemos que hacer.
Las aplicaciones GPS colaborativas del móvil nos ayudan, y mucho. Yo uso Waze y me parece una pasada por lo bien que funciona y, curiosamente, lo bien que lo alimentamos entre todos.
Pero esa ayuda extra cuando vas a 129, velocidad que a priori no implica multa en autopista, y de repente la limitación baja a 100, o a 80, es inestimable para que el bolsillo no sufra.
Con el detector portátil que hace de avisador y nos informa por GPS de todos los puntos «conocidos», tenemos el plus de detección, incluso de esas nuevas pistolas láser, que hará que la anterior maniobra de bajar de 129 a 80 sea coser y cantar.
Vale la pena el riesgo de que «te pillen»? Esto lo dejó a cada uno de decidir.